Barrio La Macarena, Bogotá D.C. Diseñado de 1964 a 1967 y construido de 1968 a 1970
La solidez de una obra arquitectónica se determina por la relación armónica entre espacios, no producto del azar o resultado obtenido al relacionar un bloque con otro, sino por la creación consciente e intencional de ese espacio.
El Conjunto Residencial el Parque, conocido popularmente como Las Torres del Parque, se encuentra localizado en un antiguo barrio obrero en el límite del Centro Histórico de Bogotá y en la falda del cerro de Monserrate que hace parte de la cadena montañosa que bordea la ciudad de Bogotá de sur a norte.
Se trata una verdadera lección urbana a partir de la implantación de tres torres singulares de vivienda en un sector venido a menos y que surgió como respuesta a unas necesidades habitacionales producto de la explosión poblacional que vivió Colombia a mediados del siglo XX. El conjunto residencial fue posible gracias a la participación del Estado teniendo como promotor al Banco Central Hipotecario¹, a los intereses, exploraciones y pujanza del arquitecto Rogelio Salmona, sumado a un numeroso grupo de colaboradores que hizo posible su construcción². En cierta medida nació como una alternativa a los modelos masivos de vivienda en serie imperantes en esa época como resultado de la desvalorización y fragmentación que produjeron las construcciones del Estilo Internacional en muchas ciudades del mundo.
El conjunto habitacional plantea un diálogo tanto con el entorno inmediato como con el lejano, que se manifiesta en la creación de espacios abiertos entre las torres que han generado un efectivo equilibrio entre lo público y lo privado, y unas extraordinarias visuales hacia todos los puntos cardinales de la sabana de Bogotá. La búsqueda constante del espacio abierto y la disolución de los límites tajantes serán temas centrales de la arquitectura de Salmona y determinantes como ejemplo a seguir frente a los fenómenos de encierro colectivo que comienzan a aparecer por aquellos años, y que se siguen manifestando con crudeza en el presente, alienando y destruyendo las ciudades latinoamericanas; de ahí la importancia de volver a revisar esta solución arquitectónica y urbana de tanto en tanto.
El proyecto se implanta en un amplio solar inclinado de alrededor de 60.000 m2 cuadrados de los cuales las torres ocupan 8.046 m2, lo que permitió liberar el resto del terreno como áreas libres que vinculan el conjunto residencial con el parque de la Independencia por el costado sur, con el barrio la Macarena y el Bosque Izquierdo por el oriente, con el barrio San Martín por el norte, y con la icónica plaza de Toros de Santa María del arquitecto español Santiago Esteban de la Mora por el occidente.
Así estratégicamente dispuesto, el conjunto ha resuelto las contradicciones urbanas de un sitio particular y ha establecido vínculos tanto físicos como afectivos con un sector de la ciudad caracterizado por contener en sus inmediaciones edificaciones e instituciones culturales de alto valor arquitectónico y patrimonial como la Biblioteca Nacional, El Museo de Arte Moderno, El Planetario Distrital, el conjunto de edificios del Centro Internacional, el Museo Nacional, la iglesia de La Perseverancia, la Universidad Distrital y la Jorge Tadeo Lozano, entre otros.
Estamos pues de cara a uno de los sectores más emblemáticos de Bogotá en términos culturales, recreativos y habitacionales en el que las Torres del Parque actúan como centro neurálgico y de orientación ciudadana. Tal y como si siguieran la implantación propia de una ciudad medieval, las torres se elevan y ocupan una determinante posición en el sitio escogido que permite su apreciación desde diversos ángulos, otorgando a los habitantes una simultaneidad de vistas y facetas diferentes e inesperadas dependiendo de su posición relativa en Bogotá.
De hecho, las tres torres se elevan siguiendo la silueta de los cerros tutelares y se distancian equilibradamente entre ellas para que el entorno natural de la montaña parezca verterse por entre los edificios y fundirse con el parque de la Independencia. De esta manera, el cerro de Monserrate que hace de telón de fondo de este sector parece diseminar su arborización por su piedemonte e integrarse al magistral escenario logrado por el proyectista en donde la arquitectura y la naturaleza encuentran su justo equilibrio.
Es consabido que en el origen de la propuesta Rogelio Salmona comenzó con la idea de realizar una sola y masiva torre, a la que posteriormente subdividió en una torre más alta y compacta de 34 pisos, flanqueada por dos torres escalonadas más bajas de 24 y 18 pisos, que en total alojan 17 tipos de viviendas y albergan 294 apartamentos en su gran mayoría dúplex. Sin embargo, la cuestión para el arquitecto estaba en cómo lograr la unidad del proyecto luego de haberlo dividido en tres partes sumado a la variedad de tipos de propuestas.
Información adicional
Fecha emisión: 14 de noviembre de 2024
Presentación: Hoja con 4 estampillas
Tamaño: 40 x 40 milímetros
No. motivos: 4
Valor facial: $10.000 COP y Hoja $40.000 COP
Impresor estampilla: Cartor Security Printing S.A.S.
Fuente: www.4-72.com.co
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